En tanto, en las regiones del sur, las comunidades crearon sus propios emprendimientos y ahora forman parte de la cadena de abastecimiento del sector, afirmó director del IIMP.
Edgardo Orderique afirmó que las compañías mineras priorizan la contratación de mano de obra local, ya sea a nivel de prácticas pre y profesionales o a nivel de incorporación en planilla, con el objetivo de brindar oportunidades a estudiantes y graduados que encuentran en la actividad minera una suerte de catapulta hacia un mayor crecimiento.
“Justamente, existen compañías mineras que realizan sus actividades con un 10 a 15% de comuneros, pero también hay otras con un 50 a 60% de comuneros trabajando en planilla directa. Es totalmente genuino que las comunidades quieran laborar para la operación minera, pero no hay espacio para todos”, declaró en entrevista con el podcast Minando Experiencias.
Asimismo, el director del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú arguyó que el sector minero es consciente de la sapiencia y potencialidades del recurso humano y apuesta por el desarrollo de capacitaciones en habilidades duras y blandas para los colaboradores, a fin de que desempeñen sus funciones en mina, planta o área que se le designe según conocimientos.
“Como industria minera, estamos convencidos de que los habitantes de las áreas de influencia poseen las habilidades o bases necesarias para aprender y trabajar con nosotros, pero por ser también una actividad que se practica con altos estándares de salud y seguridad, necesitamos capacitarlos debidamente antes de que puedan ejercer sus tareas”, aseveró el ejecutivo.
Empresas comunales
De manera similar, con la experiencia de haber observado la evolución de las relaciones entre compañías mineras y zonas de influencia, durante su paso como gerente general de Antapaccay y Las Bambas, en Cusco y Apurímac, respectivamente, Edgardo Orderique atestiguó que las comunidades campesinas paulatinamente tomaron protagonismo en la cadena de valor.
“Por ejemplo, en las regiones del sur, las comunidades son parte de los emprendimientos que requiere la compañía minera para el funcionamiento de sus actividades. Estamos hablando de conservación de edificaciones, limpieza de habitaciones y servicios de alimentación y alojamiento”, dijo el presidente del XV Congreso Nacional de Minería – CONAMIN 2024.
Y no solo ello, pues explayó que las empresas comunales han adquirido mayor nivel de especialización con el transcurrir de los últimos veinte años, a tal punto de que se están encargando de actividades aún más importantes, como son el transporte de concentrados, el mantenimiento de equipos de minado y el sostenimiento de las plantas concentradoras.
“En la edición de PERUMIN 36, fuimos testigos de diversos emprendimientos locales. Un caso muy cercano fue el de FH Ingenieros, una empresa comunal que se desarrolló de la mano de Las Bambas”, aseguró el ejecutivo sobre esta prestadora de servicios de mantenimiento, fabricación, ingeniería e Infraestructura, cuyo centro de operaciones está en Arequipa y Apurímac.